David Carrick, de 48 años, un oficial de policía de Londres, se declaró culpable de 49 delitos, incluyendo 24 cargos de violación, agresión, intento de violación y encarcelamiento falso, cometidos durante un período de 17 años.
Este es uno de los casos más impactantes que involucra a un oficial de policía en servicio. Carrick se unió a la fuerza de la Policía Metropolitana de Londres en 2001 y se desempeñó en el comando de protección parlamentaria y diplomática.
El departamento de policía se disculpó con las víctimas después de que se hicieron nueve denuncias de violación y otros delitos contra Carrick entre 2000 y 2021.
Él fue suspendido de la fuerza solo después de su arresto por una denuncia de violación en 2021. La comisionada adjunta Barbara Gray dijo que el caso era “devastador” y se disculpó por no sacar a Carrick de la fuerza antes.
“Él ha tenido un impacto devastador en la confianza de las mujeres y las niñas por la cual hemos trabajado muy duro en ganar. Él ha devastado a colegas”, dijo Gray en un comunicado. El alcalde de Londres, Sadiq Khan, dijo que estaba “absolutamente asqueado y horrorizado” por las revelaciones.
Carrick conoció a algunas de las mujeres a través de sitios de citas en línea o en eventos sociales, usando su posición como policía para ganarse su confianza.
Las víctimas no se sintieron capaces de presentarse antes porque Carrick les dijo que no les creerían, dijo Gray.
La policía dijo que Carrick usó su posición de autoridad como un oficial de policía para controlar y coaccionar a sus víctimas. Esto es algo que debería haber sido detectado y tratado de manera adecuada, pero no lo fue, lo que permitió que Carrick continuara cometiendo estos delitos.
En resumen, este caso es un recordatorio de la importancia de tener mecanismos en el lugar para detectar y tratar el comportamiento abusivo y las violaciones cometidas por los oficiales de policía.
Es necesario trabajar para ganar la confianza de las víctimas y hacer todo lo posible para protegerlos de los agresores.